Metropolita Mihailo

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Metropolita Mihailo (en montenegrino -cirílico-: Михаило) en español: Miguel. Se trata del actual Metropolita Primado de la Iglesia Ortodoxa de Montenegro, el cual asumió su cargo en el año 1997. Él ostenta el Título de Arzobispo de Cetinje y Metropolita de Montenegro.

Metropolita Mihailo, nació el 8 de Noviembre del año 1938 en la aldea de Ramovo Ždrijelo, Zeta, en el otrora Reino de Yugoslavia, bajo el nombre secular de Miras Dedeic, siendo bautizado dentro de la Iglesia Serbia el 20 de Noviembre del mismo año en la capilla de la Transfiguración del Señor. Su familia pertenece al clan Drobnjak, los cuales se trasladaron a Dobrilovina en el siglo XVI.

PRIMEROS PASOS DE SU VOCACIÓN RELIGIOSA

A la edad de 21 años, el joven Miras, futuro Metropolita Mihailo, mostrando ya signos de una profunda inclinación religiosa, ingresa al Seminario del Patriarcado Serbio en Prizren (kosovo), sin embargo, debido a ciertas actitudes marcadamente pro serbias de sus formadores, las cuales iban en detrimento de su identidad montenegrina, terminarían por forjar un clima - que con el tiempo - impediría la prosecución de sus estudios en aquella Institución. Sin embargo él finalizaría la Escuela Superior de Estudios Clásicos de Prizren, lo cual lo dotaría de una fina sensibilidad intelectual. No contento con su formación humanística, se matriculó en la Universidad de Pristina (Kosovo) donde estudiaría Pedagogía; sin embargo, a pesar de sus éxitos académicos, insistió en formarse en lo que constituía su verdadera vocación, para lo cual no dudaría en dirigirse al Obispo de Rasca-Prizren, Vladika Pavle (futuro Patriarca), a fin de solicitar su Bendición para incorporarse a la Facultad de Teología de la Universidad de Belgrado (Serbia) en Septiembre de 1965, dónde cursaría como alumno regular, para finalmente graduarse cuatro años mas tarde.

En Noviembre de 1969, el Santo Sínodo de la Iglesia Serbia lo nombró como profesor asistente de la Escuela Monástica del célebre Monasterio de Ostrog. Sin embargo los sinsabores no tardarían en llegar, pues el entonces Metropolita Serbio de Montenegro, Vladika Danilo, no simpatizaba con el joven profesor, hasta que finalmente terminó por removerlo de su cargo en Octubre de 1970.

El Profesor Cedo Drašković, advirtiendo en el joven Miras un gran potencial intelectual, lo envió a perfeccionar sus estudios en el prestigioso Instituto Pontificio Oriental de Roma (Russicum). Allí terminó sus estudios en Junio de 1973; sin embargo a su regreso, la oposición de Metropolita Danilo a su persona seguía intacto y sistemáticamente se dedicó a sabotear los Estudios de Post Grado que tanto deseaba realizar el joven profesor. Finalmente, asediado por la persecución del Metropolita Danilo, resolvió abandonar sus estudios de postgrado que había iniciado en la Academia de Espiritualidad Rusa de San Sergio, en Zagorsky, a fin de retornar a Montenegro.

SU FORMACION SECULAR

El Profesor Drašković, viendo todo lo acaecido, apostó nuevamente a las cualidades intelectuales de su joven colega, y lo recomendó para trabajar en el Archivo de Estado de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, donde trabajó un par de meses; posteriormente fue convocado a trabajar en la Academia Serbia de Ciencias y Artes, dónde asistía a su Director. Al poco tiempo obtiene acceso como investigador de historia a la Biblioteca Scedrin en Leningrado; luego trabajó para la Cátedra de Historia, y se lo empleó para recoger y clasificar documentos pertenecientes s los siglos XVI al XVIII en el Archivo de Trieste, Italia, lo cual lo dotaría de profundos conocimientos históricos sobre su tierra de origen: Montenegro.

En 1982, el prestigioso académico serbio, Radovan Samardžić, impresionado por las dotes intelectuales del Profesor Miras Dedeic, lo recomienda al Archivo de Estado de Italia, donde es empleado por el Ministerio Italiano de Relaciones Exteriores. También desarrollaría algunos trabajos en el Archivo Vaticano, en el Archivo de la Propaganda Fide, y en el Archivo de Venecia, lo cual terminó por dotarlo de una aún más sólida formación humanística.

Como resultado de todo esto, el futuro Metropolita Mihailo, aprendió a hablar fluidamente el italiano, el ruso, y el griego; así como también comprender el francés, siendo capaz además de traducir textos del latín. Sus refinadas cualidades humanas e intelectuales le llevarían a forjar cierta amistad con quién fuera el Sucesor del Trono de Italia, Umberto II, donde también trabajó en sus Archivos en la pequeña ciudad de Cascais, Portugal, a fin de recopilar documentación relativa a la Reina Helena (Jelena), quién fue una Princesa montenegrina desposada con el Rey de Italia, de cuyo matrimonio nacería el propio Umberto.

SU SACERDOCIO EN ITALIA

Luego de llevar una vida secular humanamente plena, el entonces Profesor Miras Dedeic, ya en la plenitud de su desarrollo intelectual, intenta abandonar todo, y retomar su primigenia vocación religiosa que manifestó desde muy joven. En 1984, intentó consagrarse a la vida monástica en las celdas del Monasterio de Ostrog, el mas afamado de su amada Montenegro, sin embargo, el Metropolita Serbio Danilo frustraría también su ingreso a la vida monástica.

Vladika Danilo, nunca simpatizaría con las orientaciones intelectuales del Profesor Dedeic, puesto que éste siempre buscó mantener vivo entre sus alumnos la memoria histórica de la antigua Metrópolis Ortodoxa Autocéfala de Montenegro, fuente de identidad espiritual y nacional de los montenegrinos de Fe ortodoxa.

Muy pronto, el profesor Dedeic, se daría cuenta que sería imposible llevar a buen puerto su vocación religiosa en Montenegro, por lo que decide marchar nuevamente hacia Italia.

Finalmente el 30 de Junio de 1988 se ordenaría como sacerdote secular dentro del Patriarcado Ecuménico, su Obispo consagrante fue el Metropolita de Austria y Exarca de Italia y Hungría, Kyrios Hrizystom. Una vez consagrado sacerdote desempeñaría sus labores pastorales por espacio de casi una década en la Ciudad de Roma, concretamente en la Catedral San Andrés.

Durante su desempeño en la Catedral Griega de Roma, logró que el entonces Patriarca, le permitiese celebrar la liturgia en eslavo para la comunidad serbo-montenegrina que había logrado conformar en Roma.

Ya en la primera mitad de los años 90, y con el proceso de disolución de la antigua Yugoslavia en pleno desarrollo, el ahora Padre Mihailo, comienza a apoyar de manera mucho mas explícita su sueño mas anhelado - y que tanto problemas le había traído en su juventud - la restauración de la antigua Metrópolis Ortodoxa Autocéfala de Montenegro

SU REGRESO A MONTENEGRO Y ELECCIÓN COMO CABEZA DE LA IGLESIA MONTENEGRINA

Ya en 1993, un viejo hieromonje montenegrino tonsurado en el Monasterio de Decani, el Archimandrita Antonije, viajaría desde Canadá a Montenegro, con el objeto de restaurar la antigua Metrópolis Ortodoxa Autocéfala de Montenegro. El sería recibido por cientos de montenegrinos que lo acompañaron en esos difíciles primeros días, meses mas tarde, se convertiría en el primer Metropolita de la Iglesia Montenegrina restaurada; sin embargo moriría repentinamente en Diciembre de 1996.

El entonces Padre Mihailo, quién celebraba la restauración de la Iglesia Montenegrina desde Roma, fue contactado por algunos montenegrinos días después de la muerte de Metropolita Antonije, a fin de pedirle que retorne prontamente a Montenegro para continuar con la obra que había comenzado su antecesor. El Padre Mihailo, era muy respetado por los montenegrinos ortodoxos, puesto que no era una figura desconocida en ambientes eclesiásticos locales, los cuales respetaban su gran formación intelectual.

El 6 de Enero de 1997, el Padre Mihailo recibe la tradicional aclamación del pueblo montenegrino en Cetinje, por el cual se procedía a elegir - según era costumbre - a los antiguos Metropolitas de Montenegro. Ante tan inesperada situación, el Padre Mihailo envía una carta dónde solicita desligarse canónicamente del Patriarcado Ecuménico, a fin de hacerse cargo de su nuevo puesto dentro de la Iglesia Montenegrina, al que es preciso señalar, que fue llamado por sus compatriotas montenegrinos que ahora se encontraban sin Jerarquía.

La Iglesia de Montenegro ahora se encontraba ante un grave problema, puesto que no tenía un Obispo quién la rija; sin embargo en 1998, la Iglesia Ortodoxa de Macedonia accede a tonsurar al Padre Mihailo como monje, y lo eleva al rango de Archimandrita, sin embargo esto, si bien mejoraba en algo la situación de la Iglesia, no alcanzaba para solucionar su problema, es por tal motivo que el ahora Archimandrita Mihailo viaja a Bulgaria a fin de contactarse con una facción del Patriarcado Búlgaro, que en aquellos años se encontraba escindido en dos Sínodos.

EL ROL DE LA IGLESIA ORTODOXA BÚLGARA EN SU CONSAGRACIÓN EPISCOPAL

La facción del Patriarcado Búlgaro que procedió a consagrar al Archimandrita Mihailo, fue la que estuvo liderada por el Metropolita Pimen de Nevrokop, el cual habiendo contado con el apoyo de otros tres Obispos del Patriarcado de Bulgaria, solicito la dimisión al Patriarca Maxim, bajo la acusación de haber sido un activo colaboracionista del antiguo Régimen Comunista. El Patriarca Maxim se negó a hacerlo, y esto produjo una división en la Iglesia Búlgara que duraría unos dos años, puesto que el antiguo y respetado Metropolita Pimen con el apoyo de un sector del Santo Sínodo, asumió el rango Patriarcal. El Patriarca Pimen fue un hombre muy estimado en Bulgaria, y tanto era así, que el entonces presidente electo búlgaro, lo eligió para que realizase el Oficio Religioso de su asunción presidencial.

Este Jerarca sería quién el 15 de Marzo de 1998, en la ciudad de Sofía, junto a otros siete Metropolitas y Obispos procedió a consagrar al episcopado al ahora Metropolita Mihailo de Montenegro.convirtiéndose de este modo, en la fuente apostólica de la Iglesia Ortodoxa Montenegrina.

En tanto el Patriarca Pimen, abdicaría a su Oficio Patriarcal el 1 de Octubre del mismo año, a fin de restaurar la unidad de la Iglesia Búlgara a pedido de un Sínodo pan-ortodoxo reunido en Bulgaria para destrabar el conflicto en dicho Patriarcado, él fallecería un año después a los 93 años, en su antiguo cargo de la Diócesis de Nevrokop. El resto de los Obispos y Metropolitas búlgaros que acompañaron a Pimen en aquella consagración, también retuvieron sus antiguos cargos, integrándose nuevamente al Santo Sínodo del Patriarcado de Bulgaria.

SU ENTRONIZACIÓN Y GOBIERNO PASTORAL

El 31 de Octubre de 1998, se procedió a realizar la entronización de Vladika Mihailo como nuevo Metropolita de Montenegro. Con este acto se daría comienzo a una etapa de crecimiento de la Iglesia Ortodoxa de Montenegro.

Al momento de asumir, el Metropolita Mihailo, se encontraría con una Iglesia casi carente de estructura, y con muy escaso clero. Era muy poco lo que había podido realizar su antecesor en tan poco tiempo.

Metropolita Mihailo, se encontraría, al comienzo de su gobierno pastoral, con la cíclopea tarea de organizar la recién restaurada Iglesia, y de insertarla tanto en el marco institucional del país, como en el mundo de la Ortodoxia. Rurante aquellos años se logró registrar a la Iglesia ante las autoricades civiles, y se comenzó a trabar relaciones con la Iglesia de Macedonia y el Patriarcado de Kiev.

Toda esta tarea Metropolita Mihailo debió conducirla en una Montenegro aún unida estatalmente a su vecina Serbia, lo cual dificultaba aún mas todo. Sin duda Vladika Mihailo, sería uno de los personajes que mas influiría en el despertar de la conciencia nacional montenegrina, que concluiría con la independencia de Montenegro el 21 de Mayo de 2006.

Durante su gobierno pastoral, se constituiría un Santo Sínodo conformados actualmente por: Metropolita Mihailo, Arzobispo de Cetinje (y Primado de la Iglesia), por el Arzobispo Symeon (Minihoffer) de Kotor - un antiguo Obispo vétero-calendarista del Sínodo en Resistencia (Arz. Kyprianos de Oropo y Fiii) y por Vladika Gorazd de Argentina - primer Obispo consagrado por la Iglesia Ortodoxa de Montenegro -

En Noviembre del año 2009, se daría otro paso de gran importancia para la vida eclesiástica de la Iglesia Montenegrina, Metropolita Mihailo, junto a su Santo Sínodo, promulgó la nueva Constitución de la Iglesia.