Ignacio de Antioquía
San Ignacio de Antioquía Ιγνάτιος Αντιοχείας (c. 35 o 50 - 98 o 107, Roma) es uno de los padres de la Iglesia, y más concretamente, uno de los padres apostólicos por su cercanía cronológica de los tiempos de los apóstoles.
Se sabe que fue obispo de la ciudad de Antioquía de Siria. El conocimiento sobre Ignacio se centra, por tanto, en el final de su vida, pero ello basta para hacer de él uno de los Padres Apostólicos mejor conocidos. Ignacio es un mártir del cristianismo y santo de la Iglesia Ortodoxa, que celebra su festividad el 20 de diciembre. Fue arrestado y ejecutado a comienzos del siglo II.
Biografía
La información sobre la vida de San Ignacio proviene principalmente de sus cartas. A través de ellas se conocen algunos datos fundamentales de su persona, como que era obispo de Antioquía como lo afirma el propio Ignacio en una de sus cartas (Ad Rom. 2, 2). Lo aseveran Eusebio (HE III, 22) y otros Padres de la Iglesia, y así se le considera actualmente. No es un dato cualquiera, pues el episcopado de Antioquía era uno de los más prestigiosos de la cristiandad.
Ignacio era obispo de Antioquía cuando fue condenado a muerte en tiempos de Trajano acusado, es de suponer, de profesar el cristianismo. En sus cartas, Ignacio se describe a sí mismo utilizando el término griego «katakritos» (condenado a muerte), lo que no aclara las circunstancias de su detención. En otros lugares afirma llevar cadenas «por causa del Nombre» (Ad Eph. 1, 2), refiriéndose a Jesucristo.
Cartas
Atendiendo al lugar desde el que fueron redactadas, las cartas de Ignacio se dividen en dos grupos: las cuatro de Esmirna y las tres de Alejandría de Tróade. El lugar de redacción se deduce en todos los casos del contenido.8 Cierta lógica relaciona los destinatarios y el lugar de redacción porque tres de las cartas de Esmirna fueron enviadas a localidades próximas,9 mientras que dos de las cartas de Tróade fueron enviadas a la propia Esmirna,10 de donde Ignacio acababa de partir. Las cartas de Esmirna son anteriores a las de Tróade, pero dentro de cada grupo se desconoce el orden de redacción. Se suele asumir el «orden eusebiano», que no es otro que el utilizado por Eusebio de Cesarea al redactar su reseña sobre Ignacio y que es el siguiente: la «Carta a los efesios» (Ad Eph.), la «Carta a los magnesios», (Ad Magn.), la «Carta a los tralianos» (Ad Tral.), la «Carta a los romanos» (Ad Rom.), la «Carta a los filadelfianos» (Ad Phil.), la «Carta a los esmirniotas» (Ad Smyrn.) y, por último, la «Carta a Policarpo» (Ad Pol.), un escrito personal dirigido a Policarpo de Esmirna, obispo de dicha ciudad a la sazón.